Tipos de sustrato para acuario: guía informativa [PRINCIPIANTES]

¡Buenas lector! 

¿Cómo va?

Muchos lectores habéis estado preguntando acerca de los tipos de sustrato para acuario que se pueden usar en un plantado. ¿Compro un sustrato inerte?, ¿qué tal la arena fina en el fondo de mi plantado?, ¿es bueno usar sustrato nutritivo? ...

Desde luego es un tema que trae de cabeza, porque hay infinidad de posibilidades. Así que vamos a dedicar este post a desgranar los tipos que existen y cómo utilizar cada uno. 

Si ya sabes los tipos que existen y quieres ver directamente un listado con los mejores sustratos para acuario plantado, accede a nuestra guía comparativa aquí. 

El sustrato para acuario es la base en la que enraízan las plantas acuáticas, asegurándose una sujeción y un aporte de nutrientes vitales para crecer de forma óptima.

Es una "tierra para acuarios" en la que, además, se asientan bacterias beneficiosas para la filtración y la correcta asimilación de nutrientes por las plantas de la pecera. 

En la naturaleza, los sustratos de las plantas acuáticas varían mucho en composición mineral y orgánica, y en textura. 

Por el contrario, en gran cantidad de acuarios todavía no se consigue cubrir bien las necesidades de las plantas acuáticas en lo referente al sustrato. Hay que saber identificar qué necesitan nuestras plantas.

Muchas plantas acuáticas absorben gran cantidad de nutrientes a través de las raíces (otras no). En estos casos, el sustrato para acuario les debe servir no sólo para fijarse, sino también para alimentarse y expandirse. 

Para que un sustrato para acuario sea efectivo, tiene que cumplir los siguientes requisitos:

1) Que el tamaño de grano del sustrato para acuario sea óptimo

Un sustrato con granos demasiado gruesos permitirá que el flujo de agua del acuario pase a través de él con excesiva facilidad, llevándose los nutrientes e impidiendo que las plantas puedan absorberlos.

Un sustrato para acuario con granos demasiado finos puede compactarse, interrumpiendo el flujo de oxígeno y nutrientes, y causando daños en las raíces de las plantas.

El mejor sustrato para acuario plantado debería tener partículas de tamaño entre 1 y 3 mm de grosor.

Otros sustratos de mayor o menor grosor (como la arena) pueden usarse a modo de complemento decorativo en las zonas del acuario donde no se piensa plantar (por ejemplo para dar forma a caminos o claros de arena sin vegetación, que pueden dar mucha vida a un paisaje acuático).

2) Que la forma del grano del sustrato para acuario no sea dañina para las raíces

?Es preferible que el sustrato tenga granos con forma más redondeada para que no dañen las raíces de las plantas naturales del acuario.

Evita en la medida de lo posible usar sustrato para plantas de acuario cuyas partículas sean “escarpadas” o de bordes afilados (eso tampoco beneficiaría a los peces).

Los sustratos de arena tienen afiladas aristas microscópicas, no son recomendables si vas a mantener peces que remueven el fondo, pero si no, puede incluirse en las zonas del acuario donde no vayas a plantar.

3) Que el sustrato para acuario tenga un contenido mineral completo y no perjudicial

?La mayoría de los sustratos que se comercializan hoy en día tienen los componentes minerales más básicos que necesitan las plantas, aunque no todos.

Suele ser necesario complementar con aportes periódicos de abono líquido. Lo que hay que tener muy en cuenta antes de comprar un sustrato para plantas de acuario es que su composición NO SEA CALCÁREA.

Los sustratos calcáreos (como ciertas arenas formadas por restos de conchas, corales u otras estructuras marinas de carbonato cálcico) incrementan la alcalinidad (gH o concentración de carbonatos y bicarbonatos) y el pH en el agua del acuario, dificultando la absorción de CO2 y nutrientes por parte de las plantas.

Los sustratos calcáreos podrían usarse en caso de que el agua de nuestro grifo fuera muy blanda (muy bajo gH y pH) de forma natural, y necesitásemos incrementar esos parámetros del acuario para mantener alguna especie de pez o planta. Pero por lo general NO se recomiendan.

4) Opcional y en muchos casos preferible: que sean nutritivos

Estos sustratos, a diferencia de las gravas o piedras inertes, contienen la cantidad de materia orgánica e inorgánica necesaria para actuar como abono de plantas de acuario.

Pueden ponerse debajo de la arena o grava para acuario o usarse solos, dependiendo del tipo de sustrato nutritivo para acuario plantado que usemos. 

La mayoría de marcas comercializan sustratos nutritivos que pueden usarse sin sellar con grava inerte, pero aún así liberarán grandes cantidades de nutrientes a la columna de agua y, si eres principiante, te costará mucho controlar tu acuario. 

Si estás empezando, lo recomendable es que pruebes con algún tipo de grava inerte, o sustrato nutritivo bien sellado y abones manualmente. 

Los sustratos inertes son aquellos que no interaccionan con el agua del acuario, y por tanto no modifican los parámetros de pH, gH, etc.

Los acuaristas principiantes suelen empezar por este tipo de sustrato para acuario, porque no requiere mucha atención ni análisis del agua.

La pega es que a largo plazo no son muy útiles por sí solos, ya que no contienen materia orgánica, y no proporcionan ningún nutriente a las plantas de acuario.

En un plantado lo ideal es no crear un fondo 100% compuesto de sustrato inerte, sino combinado con algún tipo de sustrato nutritivo para acuario plantado. 

Clasificamos los sustratos inertes según el tamaño de grano y su composición mineralógica: arena para acuarios y grava.

El sustrato inerte de menor granulometría (menor tamaño de grano) es la arena para acuarios. La arena de acuario tiene grosores de 0.5 a 2 mm.

Un sustrato tan fino como la arena para acuarios puede causar problemas a largo plazo, porque con el tiempo se compacta e interrumpe el flujo de agua a través de sus partículas, generando condiciones anaerobias en el suelo (sin oxígeno) que llevan a un estancamiento y liberación de toxinas.

Por ello, la arena fina para acuarios no debería usarse como único sustrato de un acuario plantado.

Sí que es muy utilizado por los aquascapistas (o paisajistas acuáticos, como el famoso Takashi Amano) para ?crear claros de arena o pequeños caminos entre las plantas, dando mucho juego en la decoración del acuario plantado.

¿Cómo poner la arena para acuario de agua dulce, entonces?

La primera opción: combinar la arena con otro tipo de sustrato para acuario.

En este caso la arena de acuario sólo haría una función decorativa, y la reservaríamos para las zonas del acuario en las que no vayamos a plantar ninguna especie.

Se colocaría sobre el sustrato que usemos como principal, en una capa fina de no más de 2 o 3 cm de grosor. Podríamos formar caminos o claros de arena. Fíjate en las siguientes imágenes.

La segunda opción: se puede compartimentar el fondo del acuario en varias zonas desde el principio, usando láminas de cartón o plástico para delimitar las distintas áreas de suelo (que posteriormente retiraremos del acuario).

En unas áreas echaríamos sólo sustrato nutritivo para acuario plantado (en las áreas donde vamos a plantar, generalmente en la parte posterior del acuario) y en otras áreas echaríamos arena para acuarios (donde no vamos a plantar, idealmente en la zona delantera del acuario, la que da al observador).

Ambas opciones son muy interesantes si queremos hacer un acuario Iwagumi o de paisajismo acuático.

RECUERDA que debes evitar la arena para acuarios de composición calcárea. En su lugar puedes adquirir arena de sílice para acuario u otras de naturaleza inerte.

Las gravas para acuario son un sustrato para acuario inerte de granulometría mayor que la arena de acuario (con granos entre 2 y 5 mm).

Gracias a su mayor tamaño de grano permiten un buen flujo de agua a través del suelo del acuario, facilitando el intercambio de oxígeno, la aportación de nutrientes desde la columna de agua (excrementos de peces o algunos restos de comida) y evitando el estancamiento y aparición de toxinas perjudiciales para las plantas.

Al ser inertes, no cambian los parámetros del acuario (lo cuál puede ser una ventaja) y no proporcionan ningún tipo de nutriente a las plantas de acuario por sí solos, pero siguen cumpliendo una función importante.

Las gravas de acuario son muy útiles en los siguientes casos:

Los sustratos de arcilla o laterita tienen un alto contenido en nutrientes como el hierro, el óxido de aluminio, el magnesio, etc. que van liberando durante un largo período de tiempo.

Además, son buenos en el intercambio de iones. La arcilla está formada por partículas cargadas negativamente, que atraerán moléculas positivas como el calcio, el magnesio, y otros nutrientes. De esta manera, facilitarán su absorción por las raíces de las plantas acuáticas. 

Se suelen utilizar como un sustrato complementario, ya que solo hace falta una pequeña cantidad.

Son de color rojizo y granulometría muy fina (casi polvo), por lo que hay que tener mucho cuidado al introducirlo en el acuario. Lo ideal es utilizarlo como tercera capa (por debajo del sustrato nutritivo principal y la grava inerte), o mezclado con el sustrato nutritivo principal debajo de la grava. 

Nunca se debe poner en la capa superficial, ya que puede dejar el agua del acuario turbia durante mucho tiempo (las partículas de polvo pesan muy poco y tardan mucho en sedimentar).

También hay que tener mucho cuidado al retirar una planta o al remover el sustrato. Solo está recomendado para acuaristas experimentados, ya que manipularlo de forma incorrecta o sin cuidado puede acabar en desastre.

Su ventaja es que tiene una concentración de nutrientes, y es mucho más rentable que otros sustratos comerciales.

Los sustratos nutritivos para acuario plantado son sustratos que sí pueden modificar los parámetros del acuario, porque están cargados de materia orgánica e inorgánica (abono para las plantas de acuario), y sí proporcionan nutrientes a las plantas acuáticas. 

Este tipo de sustratos son increíblemente útiles si vamos a mantener ciertas plantas (exceptuando musgos y algas, entre otras, que utilizan piedras o troncos a modo de sustrato, en vez de la “tierra para acuarios”).

Las granulometrías del sustrato nutritivo son muy variadas, desde el sustrato de arcilla o laterita, con granulometría muy pequeña, hasta los sustratos enriquecidos o tipo suelo de mayor tamaño de grano.

Consejo: siempre que vayas a usar un sustrato nutritivo comercial sin sellar con grava, coloca debajo de dicho sustrato una capa de material más poroso y grueso, como los sustratos de piedra volcánica. Esto permitirá a las raíces fijarse mejor. 

Los sustratos enriquecidos para acuario son sustratos nutritivos que han sido diseñados específicamente para los acuarios plantados.

Generalmente están compuestos por una base de laterita, más materia orgánica y mineral adicional que libera gran cantidad de nutrientes durante largos períodos de tiempo.

Hay sustrato para acuario enriquecido de menor granulometría para combinar con grava inerte, y actualmente también han desarrollado sustratos para utilizar solos (como capa única), lo que ha supuesto un gran adelanto en el mundo de los acuarios plantados.

Este tipo de sustrato para acuario además de práctico es muy estético (suele tener colores negros o marrones terrosos). 

Algunos están diseñados para modificar los parámetros del acuario hasta adecuarlos a los niveles óptimos para las plantas de acuario.

Colocando un sustrato para acuario enriquecido como capa única deberías conseguir un espesor de 8 o 9 cm en la parte trasera y 4 o 5 en la delantera, aproximadamente.

También depende del tipo de plantas que quieras meter, si tienen raíces muy grandes necesitarás más espesor de sustrato, y si tienen raíces pequeñas (como algunas plantas tapizantes para acuario) te valdrá un menor espesor.

Investiga previamente las características de las plantas acuáticas que te interesan.

Si eres principiante en la acuariofilia, evita los sustratos tipo suelo, porque si no se usan con cuidado, los resultados pueden ser catastróficos.

Los acuaristas experimentados pueden encontrar en el sustrato para acuario tipo suelo uno de los mejores sustratos de larga duración.

Contiene grandes cantidades de hierro y carbón (muy beneficiosos para las plantas acuáticas) y muchos otros nutrientes que se van liberando lentamente. Si finalmente te decantas por usar un sustrato para acuario tipo suelo, coloca una capa de 2.5 a 4 cm de grosor cubierta por otra capa de 2.5 cm de grava fina.

Lo más seguro es utilizar compost para plantas (tierra abonada para macetas) esterilizada (NUNCA tierra de jardín) para evitar contaminar el acuario.

Ya que el sustrato para acuario tipo suelo tiene altísimo contenido en materia orgánica, su descomposición lenta libera CO2 (muy útil para la fotosíntesis de las plantas acuáticas) y no suele ser necesario añadir CO2 adicional, lo que supone un ahorro.

Tampoco es necesario complementar con otros tipos de abono ni con suplementos de hierro.

Durante la primera semana de uso, el sustrato liberará una gran cantidad de nutrientes y materia orgánica. Las plantas deberían poder lidiar con ello, pero en ocasiones se originan condiciones peligrosas para los peces de acuario.

Por ello, sería bueno esperar unas pocas semanas antes de introducir los peces, filtrar con carbón o hacer cambios periódicos de agua. Se deben ir controlando los parámetros del acuario.

Para principiantes, es mucho más seguro utilizar sustratos que, aunque sean algo más caros, estén específicamente diseñados para acuarios y supongan una opción mucho más predecible que los sustratos tipo suelo.

Si eres principiante, puedes optar por:

1) Fondo compuesto 100% por grava inerte. No uses arena para plantar, solo a modo de decoración si quieres en zonas sin plantas. Todos los nutrientes que le falten a las plantas tendrás que abonarlos manualmente.

La ventaja es que controlarás en todo momento qué nutrientes hay en tu acuario. Puedes ver aquí cómo hacer un abonado completo del acuario. 

2) Fondo compuesto por sustrato nutritivo en las zonas donde vas a plantar, sellado con una capa de grava inerte por encima. Muy recomendado. Puedes disfrutar de las ventajas de tener un nutritivo, y las ventajas de no tenerlo. 

Si tienes experiencia en plantados:

1) Sustratos nutritivos como elemento único de fondo, o combinado con gravas y arenas decorativas.

Si vas a cubrir totalmente el fondo con nutritivo, tendrás que llenarlo de plantas que aprovechen dicho sustrato desde el minuto 0. De lo contrario tendrás desequilibrios químicos importantes. 

Lo mejor es que uses el sustrato nutritivo sólo en las zonas donde vas a plantar. En el resto, puedes usar gravas o arenas inertes. 

2) Sustrato nutritivo tipo suelo (muy experimentados).

Después de leer sobre todos los tipos de sustrato para acuario que existen y cómo utilizarlos, te preguntarás cómo calcular la cantidad de grava en un acuario: es decir, cuántos litros de sustrato has de comprar para conseguir una capa de 8, 4, 6 cm, etc.

El cálculo es muy sencillo:

Apunta las medidas de largo x ancho x alto de tu acuario. Por ejemplo, imaginemos que mide 120 x 50 x 40 cm.

Sustituye el alto del acuario (en este caso 40 cm) por el espesor de sustrato para acuario que quieres. En este caso pondremos 8 cm de espesor.

120 x 50 x 8 cm = 48000 cm3 = 48 Litros.

Necesitarías un total de 48 litros de sustrato para conseguir una capa de 8 cm de espesor de sustrato en tu acuario.

Muchas bolsas de grava y sustrato nutritivo para acuario vienen en litros, simplemente debes saber cuantas bolsas necesitas para llegar a los 48 litros de sustrato.