Cómo montar un acuario plantado paso a paso [Principiantes]

¡Hola lector!

Si has llegado hasta aquí es porque has decidido iniciarte en un hobby extremadamente apasionante: el de los acuarios plantados. 

Quizá incluso ya has intentado montar uno sin demasiado éxito. En esta afición es primordial informarse bien antes de hacer nada, no te desanimes. Prueba y error. El resultado será que evolucionarás como acuarista y montarás acuarios cada vez mejores. 

Haciendo uso de la famosa frase de Allen Carr, vamos a decir que “montar un acuario plantado es fácil, si sabes cómo”.

Y precisamente ese es el objetivo de este artículo: enseñarte desde cero cómo montar un acuario plantado paso a paso, respetando una serie de pautas básicas que asegurarán una pecera sana y a pleno rendimiento. 

Hablaremos del material que se necesita como punto de partida, la manera correcta de colocar la decoración del acuario, cómo montar el filtro de la pecera, los procesos químicos del acuario, cómo introducir las plantas, etc.

Te acompaño en todo el proceso de maduración de un acuario plantado punto por punto, para que no te pierdas. Te doy las claves para que tu proyecto llegue a buen puerto sin morir en el intento.

¡Vamos a ello!

Si te has dado una vuelta por la web de Acuarema, ya te habrás hecho una idea aproximada de lo que es un acuario plantado. La definición más intuitiva es la que reduce al acuario plantado a una simple pecera con plantas acuáticas. Sin embargo, es una definición tan reduccionista que se queda corta.

El acuario plantado no es solo una urna con plantas naturales, sino que conforma un ecosistema natural a pequeña escala, en el que suceden los mismos procesos biológicos y químicos que se dan en lagos, ríos, pantanos, estanques, etc. siguiendo los mismos ciclos y oscilaciones.

Así pues, saber cómo montar un acuario plantado paso a paso es esencial para no perder nuestro tiempo y dinero (porque sí, la acuariofilia es un hobby en el que hay que poner dinero o tirar del método DIY).

Además, quizá te interese saber cómo montar un acuario plantado según las normas del aquascaping o paisajismo acuático, intentando recrear los paisajes subacuáticos reales. En este artículo tratamos más extensamente cómo diseñar un acuario plantado según el aquascaping.

La filtración del acuario es una de las partes más importantes de un montaje. Retira las partículas sólidas y transforma el amoniaco (bastante tóxico para los animales) en nitratos.

Aunque en un acuario plantado las propias plantas toman su papel en la filtración, igualmente será necesario hacerse con un filtro. 

¿Por qué, si las plantas filtran? 

Porque generalmente no serán capaces de asimilar todos los desperdicios de los peces (a no ser que tengamos un plantado enorme tipo holandés y muy pocos peces), y éstos se acumularán hasta hacer el agua insalubre. 

Antes de nada, pásate por la sección de filtros de acuario para aprender lo básico.

La iluminación es, sin duda, una de las claves del acuario plantado. Será un factor determinante a la hora de conseguir que las plantas de acuario tiren o no.

Las plantas acuáticas utilizarán la iluminación que les demos para realizar la fotosíntesis, tal como harían en su hábitat natural. Una iluminación insuficiente o en exceso puede provocar desequilibrios que resulten en aparición de algas, muerte o estancamiento de las plantas...  

Generalmente, proporcionaremos más o menos cantidad de luz dependiendo de los requerimientos de las plantas, la altura y los litros de acuario, disponibilidad o no de CO2 y abono, etc. 

En nuestra sección de iluminación tienes todo lo que necesitas saber para no equivocarte en la elección de tu pantalla para acuario. 

Las indiscutibles reinas y señoras de un plantado, lógicamente, son las plantas naturales para acuario. 

Son seres vivos, y como tales tienen unos requerimientos específicos de luz, nutrientes, calidad del agua, etc. 

Si quieres mantener un acuario plantado de éxito, necesitas saber las bases (y luego avanzar a un nivel más alto) del abonado, el CO2 en el acuario, los sustratos, las especies disponibles para cada tipo de acuario... 

Échale un ojo a nuestra sección de plantas para acuario, ¡te prometo que aprenderás cosas muy útiles!

Antes de aprender cómo montar un acuario plantado, tenemos que saber dónde colocarlo.

Montar el acuario en el sitio incorrecto puede traer problemas con las algas, con el comportamiento de los peces, con la estructura del acuario (que puede romper), con el mueble que lo soporta, etc. Y no es recomendable ni fácil cambiar un acuario de sitio una vez montado.

Así que asegúrate de que el lugar donde vas a colocar el acuario plantado cumpla los siguientes requisitos:

QUE NO DE DIRECTAMENTE LA LUZ DEL SOL

La luz solar será el primer enemigo a sortear cuando montemos el acuario. El acuario va a llevar su propia lámpara, con la que controlaremos exactamente la cantidad de luz que le llega a nuestro ecosistema subacuático.

Si además de la luz de la lámpara, la luz del sol incide sobre nuestro acuario demasiadas horas al día, las algas pueden aprovecharse de esa fuente de energía extra y crecer en explosión hasta cubrir todo el acuario plantado.

Te aseguro que no hay nada peor que las algas en un acuario plantado, porque eliminarlas totalmente cuesta dinero y mucha salud mental. También afecta a la temperatura del acuario y, además, los peces se comportan diferente, inclinándose perpendicularmente al haz de luz.

Tampoco hace falta que metas el acuario en el cuarto oscuro… basta con que no le de directamente la luz del sol, o le de muy poco tiempo.

Así que a la hora de decidir dónde colocar el acuario plantado ten en cuenta cosas como la orientación de la casa, las horas de luz, la estación del año y demás.

QUE NO HAYA CORRIENTES DE AIRE

Esto es importante para mantener estable la temperatura del acuario. Imagínate que colocas el acuario en un pasillo donde no le da la luz del sol, pero en invierno cuando abres alguna ventana para ventilar la casa, en ese pasillo se forman corrientes de aire notables.

En este caso la temperatura del acuario podría descender rápidamente, sin dar tiempo a los termostatos del acuario plantado a reaccionar.

Los cambios de temperatura en el acuario NO son recomendables. Vamos a evitarlos: coloca el acuario plantado en un sitio sin corrientes de aire.

QUE EL SUELO SEA PLANO

Un acuario pesa mucho. Piensa en el vidrio con el que está fabricada la pecera, el sustrato y la grava, las piedras, el agua (cada litro de agua pesa prácticamente 1kg), etc. Un acuario plantado de, pongamos, 60 litros, puede pesar más de 80 kg.

Y ya no digamos acuarios de mayor tamaño como los de 200 L. Si el suelo no es plano, el acuario estará soportando un peso extra en puntos donde “no le toca” y puede llegar a romper. 

El mueble que aguanta al acuario tampoco debería soportar más peso de un lado que de otro, sino que debería repartirse equitativamente entre las patas o la base, de tal manera que se eviten daños tanto en el mueble como en el suelo (en el caso de que el mueble rompa, puedes tener un gran problema).

Si el suelo no es plano lo ideal es nivelar el mueble calzando las patas o las esquinas hasta dejarlo equilibrado. Ésto habría que hacerlo antes de montar el acuario. Intentar nivelar un mueble con el acuario lleno es tarea difícil y potencialmente peligrosa.

Algunas preguntas que pueden haberte surgido:

En éste apartado aprenderás cómo montar un acuario plantado paso a paso y desde cero, si sigues las recomendaciones de instalación que te dejo a continuación.

Antes de llegar a este punto, tienes que haber decidido qué tipo de sustrato poner en el acuario.

Los sacos de sustrato suelen venir con una buena cantidad de polvo de regalo en su interior. Si lo metieras directamente en el acuario plantado y comenzaras a llenarlo, el agua quedaría totalmente turbia durante varios días (incluso semanas). Para evitarlo vamos a lavar el sustrato previamente. (Ten en cuenta que algunos sustratos NO hay que lavarlos, infórmate antes leyendo las recomendaciones del producto).

La manera más sencilla de hacerlo es que vuelques el saco de sustrato en un cubo. Procura que el cubo esté totalmente limpio y sin restos de productos químicos.

Si tienes una manguera a mano, rocía con ella el sustrato, hasta que se llene el cubo y éste quede sumergido. Puedes hacerlo en la bañera o en el fregadero, si es lo suficientemente grande. 

Aún después de lavar el sustrato, es normal que después de llenar el acuario plantado el agua quede un poco turbia. Los sedimentos finos se posarán sobre el fondo al cabo de un par de días sin mayor problema, no te preocupes por eso.

ATENCIÓN: Nunca utilices detergentes o jabones para lavar el sustrato, porque por mucho que lo enjuagues siempre quedará algún resto. Es totalmente incompatible con la vida del acuario.

Coloca el sustrato o sustratos escogidos en el fondo del acuario. Hazlo con mucho cuidado para evitar que la base de la urna se raye o dañe, para ello puedes ayudarte de una cuchara o un recipiente pequeño.

Una vez esté echado, extiende bien el sustrato con las manos o con una espátula hasta cubrir uniformemente el fondo.

Se recomienda formar una ligera inclinación del sustrato desde la parte posterior hasta la frontal del acuario, dando una perspectiva de mayor profundidad a la pecera, y la posibilidad de colocar las plantas en pisos o “terrazas” de distinta altura.

De esta manera, debería quedar un espesor de sustrato de 6-8 cm en la parte posterior, y de 4-5 cm en el frente del acuario.

Aunque las recomendaciones varían según el tipo de plantas que quieras mantener: las del género Echinodorus, por ejemplo, tienen grandes raíces que enseguida se extienden por el acuario, y probablemente necesiten mayor espesor de sustrato; por el contrario, las plantas tapizantes de acuario tienen raíces pequeñas y pueden enraizar muy bien en capas de sustrato poco profundas.

No te preocupes por el menor espesor del sustrato en la parte delantera del acuario: las plantas acuáticas que colocamos en esta zona tienen raíces poco profundas y no necesitan demasiada cantidad de sustrato.

También puedes formar algún montículo de sustrato, para dar un aspecto asimétrico al fondo del acuario. Las plantas quedarán a diferentes alturas formando “montañas”.

Lo primero es introducir rocas y troncos, que van a constituir el esqueleto decorativo del acuario, dejando los huecos pertinentes en los que colocaremos las plantas acuáticas. Previamente has de lavar las rocas y curar la madera que vas a meter en la pecera:

-Cómo lavar piedras para acuario. Para limpiar y desinfectar piedras para un acuario, puedes introducirlas en agua hirviendo y dejarlas “cocer” durante 15 o 20 minutos.

Al sacarlas, los restos de suciedad, organismos o materia orgánica que pudieran tener se elimina o se reblandece.

Aprovecha para frotar la roca con un cepillo o algo similar. Es recomendable repetir este proceso unas 2 o 3 veces con todas las piedras que vayas a introducir.

-Cómo curar madera para acuario. La madera es en sí materia orgánica, y procede de un organismo vivo.

Esto quiere decir que es susceptible a pudrirse y descomponerse, por lo que debemos escoger una madera apropiada y someterla a un proceso de curación antes de introducirla en el acuario plantado. En este post explicamos de forma más extensa cómo curar madera para acuario en sencillos pasos.

Ten en cuenta que no vale cualquier tipo de piedra ni cualquier tipo de madera, ya que algunas pueden cambiar la composición química del agua y desestabilizar nuestro ecosistema, haciéndolo potencialmente perjudicial para peces y plantas, o causando la aparición de algas. Descubre aquí qué tipo de piedras y maderas se pueden introducir en un acuario plantado.

Coloca el calentador del acuario en la parte posterior de la urna, en alguna zona en la que vaya a quedar disimulado con las plantas que vas a introducir.

Como recomendación: no lo pongas en vertical, porque si no vigilases bien la evaporación del agua de la pecera, la cabeza del calentador con el termostato podrían quedar emergidos. En este caso el termostato te estaría midiendo la temperatura ambiente, y no la del acuario.

Coloca el calentador inclinado 30 o 45º en la pared del acuario.

Coloca también el filtro de acuario, al que previamente debes haber introducido (si no viene así de fábrica) los materiales filtrantes. Aquí puedes ver los tipos de filtros de acuario que hay en el mercado, y cuál es el mejor para tu acuario en particular.

Una vez hayas colocado el sustrato, la decoración del acuario, el filtro y el calentador, llega el momento de llenar la pecera. Puedes utilizar agua del grifo, investigando previamente las características químicas del agua de tu zona (las empresas de gestión de agua de tu ciudad suelen proporcionar esa información a través de Internet). Conocer el datos como el pH, la dureza, la alcalinidad, la concentración de metales pesados, etc. es importante a la hora de escoger las plantas y peces que vas a mantener en el acuario.

Las características del agua, si no son del todo satisfactorias para las especies que quieres tener, siempre pueden modificarse mezclándose con otros tipos de agua o mediante sustratos, rocas, o material de filtración química. Por eso no te preocupes. En éste post detallamos cómo hacer agua de calidad para acuario.

Para llenar el acuario sin levantar todo el sustrato, coloca un plato de plástico o una bolsa sobre la grava, y dirige el chorro de agua contra él (nunca apuntes al sustrato directamente).

No hace falta que llenes el acuario hasta rebosar, puedes dejar dos o tres dedos de la urna sin llenar.

Tras un día o dos de reposo (al 2º o 3er día de llenar el acuario), las partículas en suspensión del agua se habrán asentado parcialmente sobre el fondo (aunque probablemente el agua siga algo turbia). Este es el momento de conectar el filtro y el calentador, dejando la iluminación del acuario apagada por el momento.

En los dos o tres días siguientes, deja el filtro funcionando y ve ajustando el calentador hasta conseguir la temperatura deseada en el acuario (unos 26 o 27ºC en caso de montar un acuario de agua dulce tropical, o 18-20ºC si pensabas en un acuario de agua fría). En estos días el sedimento se asienta completamente (quedando el agua clara), el cloro del agua se evapora y se oxigena el agua con el movimiento de la superficie, gracias al filtro.

A partir del 4º día comenzamos el proceso de ciclado. Pincha aquí para saber con más detalle qué es el ciclado de un acuario. TODAVÍA NO METEMOS PECES, primero hay que acondicionar el agua mediante el ciclado.

Para ello, añade todos los días unas pocas escamas de comida al acuario (vale con dos o tres escamas al día para un acuario de 70 a 100 litros).

Con esta rutina, estamos proporcionando materia orgánica en descomposición que permite el crecimiento de las bacterias nitrificantes. Estas bacterias son necesarias, sin ellas, la vida en el acuario no sería posible.

En el proceso de ciclado, las bacterias irán desarrollándose y asentándose en el filtro del acuario.

El ciclado acaba en unos 30 o 45 días, y será entonces cuando introduciremos los peces en el acuario. Hay que tener paciencia. Introducir a los peces antes de tiempo, si no se hace muy progresivamente y con sumo cuidado, puede retrasar el ciclo y/o matar a los ejemplares.

¿Cómo saber si ha terminado el ciclado del acuario? Porque previamente debes haber comprado un test de Nitritos. Iremos midiendo la cantidad de nitritos del agua cada 2 o 3 días a partir de la primera semana de la puesta en marcha del acuario. 

Cuando el test nos de una lectura de 0 nitritos, sabremos que el ciclado ha terminado, y podemos introducir peces.

Inciso: hay quién prefiere ir introduciendo los peces progresivamente durante el ciclado. Por ejemplo, después de la primera semana meter un par de peces pequeños (como los guppys). Tras otra semana más otros tres o cuatro peces, y seguir progresivamente hasta alcanzar el límite de la población máxima de tu acuario, dependiendo de su volumen.

Sin embargo, es totalmente preferible esperar al término del ciclado para meter algún pez.

No hay ningún problema en plantar las primeras plantas acuáticas mientras dura el proceso de ciclado y se asientan las primeras bacterias de la pecera. Cuando detectes una subida de nitritos puedes introducir las especies de plantas más resistentes (como las plantas del género Cryptocoryne, Vallisnerias o Anubias), dejando las más delicadas para más adelante. También hay quién planta el acuario completo el primer día de montaje, o hay quién espera a que se termine el ciclado para plantar todo el acuario. Si plantas el acuario desde el primer día puedes retrasar el ciclado o bloquearlo totalmente, y si esperas al último día no aprovechas la capacidad de las plantas para limpiar de amoniaco/amonio el acuario después de la primera fase del ciclado. 

En cualquier caso, debes limpiar las plantas antes de introducirlas en la pecera, utilizando agua templada, retirando hojas y raíces muertas (que aportarían amonio al agua y retrasarían el proceso de ciclado). Las plantas suelen traer caracoles y algún pequeño gusano (o sus huevos). Limpia a conciencia para evitar plagas en el acuario.

Puedes plantar ayudándote de unas pinzas para hacer la tarea con mayor precisión, sin remover demasiado el sustrato.

En el momento en que plantemos, hay que iniciar las rutinas de abonado y conectar la iluminación durante 8-10 horas al día. Es recomendable tener iluminación de acuario formada por más de una lámpara, o por una lámpara que permita controlar la intensidad de la iluminación. De esta manera podemos iniciar el fotoperíodo poco a poco (luz menos intensa en la primera media hora, y luego subes la intensidad al máximo, pero no de golpe), esto reduce el shock de plantas y animales a una iluminación intensa repentina.

Por otra parte, se puede controlar el crecimiento de ciertas algas mediante un “período de siesta” en la iluminación. Indagaremos más sobre el mejor fotoperíodo para un acuario de agua dulce próximamente. 

A partir del 7º día, realizaremos la primera lectura de nitritos, y en adelante se repetirá cada 2 o 3 días. El objetivo es ir viendo como evolucionan los niveles de nitritos a lo largo del proceso.

En esta primera medición, puede que la lectura te de 0 nitritos. Pero cuidado, eso no significa que haya terminado el proceso de ciclado (recuerda que estás en la primera semana todavía, y esto dura de 30 a 45 días). Eso solo puede significar que aún no hay ninguna bacteria que transforme el amoniaco del acuario en nitritos.

Cuando se asienten las primeras bacterias nitrificantes, a los pocos días, verás que los niveles de nitritos suben hasta un máximo, y luego comienzan a bajar progresivamente hasta llegar a 0. Es en este punto cuando la comunidad bacteriana del filtro es estable y trabaja a pleno rendimiento. Ha terminado el ciclado.

Durante estos días también es bueno que te informes sobre los parámetros químicos del agua de tu grifo. Si tuviese, por ejemplo, un pH o una dureza demasiado alto para los peces que quieres mantener, puedes mezclarla con agua embotellada de menor pH y dureza, o incluso con agua de ósmosis.

Vigila de vez en cuando las plantas del acuario, y retira inmediatamente las hojas muertas, ya que pueden retrasar el ciclado aportando amoniaco al agua.

Cuando la lectura de nitritos de 0, haz el primer cambio de agua (retirando el 25% del agua del acuario y reemplazándola por agua nueva sin cloro, es decir, agua que lleve reposando al menos un día para que se evapore el cloro). Para ello puedes ayudarte de un sifón. El agua que introduzcas deberá llevar el mismo tratamiento que la del interior de la pecera (si la del acuario la has mezclado con agua de ósmosis o embotellada, por ejemplo, debes hacer lo mismo para el agua nueva).

Este paso realmente empieza cuando introduces los primeros peces. En ese momento debes alimentarles en PEQUEÑAS cantidades (para no disparar los niveles de amoniaco por exceso de materia orgánica en el agua), más o menos lo que veas que los peces se comen en dos o tres minutos.

Aliméntalos varias veces al día (4-5).

Puedes usar comida en escamas para peces, pero idealmente deberías complementar esta alimentación con otro tipo de comida más nutritiva. En este post hablamos de todos los alimentos disponibles para peces.

Implanta una rutina de cambios de agua. Lo ideal es que cambies el 15-20% del agua del acuario semanalmente, desconectando el calentador y el filtro durante el proceso.

Aprovecha para retirar hojas muertas y para limpiar alguna capa del filtro (en caso de que alguna estuviera sucia) con el mismo agua retirada del acuario.

Realiza de vez en cuando (semanalmente o cada 15 días) test de nitritos, pH, kH, nitrato y fosfatos. Estos test nos darán una idea de la calidad del agua del acuario. Nos indicarán si tenemos que hacer cambios de agua con más frecuencia si hay niveles de nitratos y fosfatos muy altos (nitratos > 20 y fosfatos > 2), ya que esto puede causar la aparición de algas. Por el contrario, si los niveles son muy bajos, debemos proporcionar abono a las plantas del acuario.

Quizá te interese saber que hay maneras de acelerar el proceso de ciclado. Por ejemplo, puedes conseguir que alguien con un acuario ya filtrado te deje material filtrante cargado de bacterias nitrificantes. En una semana puedes tener el acuario totalmente ciclado.

También existen productos en el mercado que ayudan en el proceso y lo reducen a pocos días, como las bacterias comerciales para acuarios.

Aún así, muchos acuaristas prefieren ahorrarse dinero y realizar un ciclado natural.